El Comité de Gestión de Cítricos (CGC) ha anunciado su apoyo a las movilizaciones convocadas por las principales organizaciones agrarias del país. La asociación de exportadores respalda las protestas que han concretado en la Comunidad Valenciana las entidades representativas de los citricultores valencianos, así como las que se están definiendo en el resto de zonas citrícolas (en Andalucía, Murcia y Cataluña) para los próximos días y semanas.

A juicio del CGC, el sector nacional dedicado a la producción de naranjas, mandarinas, limones y pomelos es ‘víctima’ –como el resto de la industria hortofrutícola española y europea– «de la progresiva pérdida de competitividad frente a la oferta foránea –más barata y producida con requisitos en materia social, laboral, medioambiental, de seguridad alimentaria o relativa al uso de fitosanitarios mucho más laxos que los europeos– provocada por las políticas comunitarias impulsadas durante los últimos años».

La asociación se refiere, específicamente, al desarrollo del ‘Pacto Verde’ europeo y a la ‘Estrategia de la Granja a la mesa’, normativas medioambientales que «amenazan la viabilidad económica» misma de la actividad y sobre las que se impone una revisión. Junto a ello, coincide con los representantes de los agricultores en la urgencia de consolidar el principio de reciprocidad aplicado a las importaciones citrícolas de países terceros, en la conveniencia de suspender la ratificación del acuerdo con Mercosur y en la necesidad de sentar las bases para que, en adelante, no se suscriba ningún otro tratado de apertura comercial o de ayuda al desarrollo sin antes haber estudiado su impacto real y la introducción de ‘cláusulas espejo’.

El CGC censura la «hipocresía y la evidente contradicción entre los grandes principios consagrados en la PAC y la política que de facto ha impulsado Bruselas en el seno de su propio mercado con las importaciones de países como Sudáfrica, Turquía, Egipto o Marruecos».

Finalmente, el CGC reclama más garantías en cuanto a la sanidad vegetal de las importaciones para evitar la introducción en la UE de organismos nocivos, plagas y enfermedades. Y en materia de seguridad alimentaria, se exige medidas más disuasorias y controles más eficaces para evitar la presencia en partidas procedentes de países terceros de residuos de plaguicidas por encima de lo permitido en la UE o con sustancias activas prohibidas. Por último, pero igual de relevante, exige al Gobierno central «soluciones con las que paliar la sequía, especialmente en Andalucía para poder salvar así el arbolado más afectado por las restricciones al regadío».

ASAJA Murcia ha advertido que la crisis en el sector del limón «está provocando una situación insostenible e inaguantable». Según ha explicado el secretario general de esta organización agraria, Alfonso Gálvez Caravaca, «es inconcebible que los precios del limón estén por debajo de los costes de producción. Es vital trabajar para una reestructuración sectorial, y tenemos que hacer rentable y competitivo este cultivo que es un emblema para el campo murciano». Por ello, ha calificado como «preocupante y grave» la situación que vive el limón murciano, y también los cítricos en general, y ha apuntado que «no se trata de buscar culpables, sino encontrar soluciones, como potenciar la internacionalización, fomentar el mercado nacional y regular mejor el sector, para dotar de competitividad a los limones de nuestra región».

Por su parte, Juan de Dios Hernández, miembro de la Junta Directiva de ASAJA Murcia, ha señalado que «la situación de los cítricos está pasando por un ciclo excepcional. Es muy necesario adaptarse al nuevo escenario, que bajo mi punto de vista es crítico. La producción está sometida a la presión de otros países, con los cuales no podemos competir actualmente».

«En cuanto al consumo. está muy ralentizado ya que los hábitos del consumidor han cambiado, como consecuencia de los altos precios de venta que marca la venta lineal o cadenas de supermercados», ha puntualizado, para añadir que «hay que adaptarse a las nuevas circunstancias, el sector debe llegar a un gran pacto con los distintos agentes para encontrar el equilibrio, ya por la supervivencia de este gran sector depende de ello».

El directivo de ASAJA Murcia ha comentado que «en ese mismo contexto, los mercados internacionales, especialmente la Unión Europea, jugaría un gran papel mediante una gran campaña de concienciación en defensa de los países productores y miembros comunitarios». Ante este escenario, «el gobierno español también debería implicarse más aplicando ayudas directas a la producción y comercialización. No podemos entrar en una situación de no retorno de un pilar fundamental para nuestro país como es la agricultura».

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Citrosol tiene su origen en la especialización en tratamientos y tecnología postcosecha para cítricos. Además, hace más de una década que la firma valenciana, gracias a su firme apuesta por la I+D+i, desarrolló soluciones para alargar la vida comercial de aguacates, y otras frutas y hortalizas. Esta es una de las razones que ha movido a la marca a evolucionar hacia una nueva imagen corporativa que mostrase todas las soluciones que ofrece en la actualidad.

La presencia en la última edición de Fruit Attraction fue el momento idóneo «para presentar esta nueva identidad corporativa que representará, a partir de ahora, la forma de ser y hacer, junto con el trabajo y los valores de la empresa». Una imagen que se presenta bajo el marco de ‘la modernidad y la evolución’ que ha experimentado la compañía en los últimos años, siempre teniendo en cuenta su historia y sin olvidar sus orígenes.

Con este cambio de imagen, Citrosol «quiere conectar con su público potencial atrayéndoles con una imagen actual, fresca y renovada. Se ha apostado por una gama de colores corporativos que se acercan a los orígenes de la empresa. Por un lado, el azul marino, representando el Mediterráneo en el que nace Citrosol y, por otro lado, el color girasol, mezclando tonalidades amarillas y naranjas que evocan al de los cítricos. Un color totalmente ligado a los inicios de la actividad empresarial».

Por otro lado, el símbolo con forma de C «representa la misión de la empresa por cuidar y proteger tanto a las frutas y hortalizas como a las personas». Querían que «el logo hablara de cómo en Citrosol nos preocupamos por el medioambiente y por el planeta, de ahí surge ese símbolo que recubre al objeto central y que podría recordar a un abrazo visto desde arriba».

El CEO de Citrosol, Jorge Bretó ha explicado que este cambio se debe a «acontecimientos como la nueva dirección de la empresa en 2021, la adquisición de Fomesa Fruitech y Brogdex Ibérica en 2022, así como el cada vez más amplio abanico de soluciones postcosecha para diferentes frutas y hortalizas». Además, el esfuerzo de la compañía «dedicado a la investigación, desarrollo e innovación hicieron necesario actualizar nuestra imagen corporativa».

Una nueva imagen que presenta una serie de elementos que ayudan a identificar la marca de una manera clara que facilita el reconocimiento de los diferentes productos y servicios que ofrece la firma valenciana. Por ello, la manager de Marketing y Comunicación, Marina Orihuel, afirma que desde Citrosol «creemos que este cambio de imagen refleja a la perfección nuestra forma de ser. Somos una empresa comprometida con la sociedad y con el cuidado del medioambiente, pues contribuimos a la reducción del desperdicio alimentario y somos especialistas cerrando la brecha entre el laboratorio y los resultados industriales». Atendiendo a esto, «nace un nuevo concepto bajo el lema ‘Stay Fresh With Innovation’ que transmite nuestro compromiso de alargar la vida comercial y mantener la frescura de frutas y hortalizas a través de nuestros valores: la innovación tecnológica y el rigor científico»

La visión de la empresa valenciana para los próximos años es, en primer lugar, «continuar desarrollando tratamientos y soluciones postcosecha de manera que puedan seguir contribuyendo a la reducción del desperdicio alimentario mundial». En segundo lugar, «seguir manteniendo el liderazgo del sector postcosecha, con un modelo de negocio más sostenible y que inspire cambios positivos». Y, por último, «seguir invirtiendo recursos en alargar la vida comercial y en mantener la frescura de las frutas y hortalizas, para que lleguen al consumidor con todo su sabor y la máxima calidad».

www.citrosol.com